Una atmósfera cálida y una noche lluviosa. Ese destello de luz del norte que me ciega y lentamente se desvanece, esa mirada fría que yace en una fuente, pero que a la vez grita en un acto de locura mientras perece.
Dos campos se resquebrajan a la mitad. De un lado crecen todo tipo de flores de gran variedad, mientras en el otro, sólo queda tierra gris y un solitario árbol seco que respira muy mal.
- nada está mal, no debo vociferar - dijo el árbol -. Mientras sus ramas caían y lloraba una vez más.
Corrí por el gigantesco campo, pero algo andaba mal... ¡Todas las promesas eran mentiras!, Usaban muchos artilugios para disimular.
Dos relojes con lanzas me perseguían y una cruz enterrada en el cristal; terminé escondido en capullos, esperando que termine el indeseado pesar.
¿continuará? me voy antes de que un verdadero rayo me caiga :P
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