sábado, 28 de febrero de 2009

Iniciando mi blog

Hoy por la mañana, al poner canal crónica, vi que habían asesinado al florista de Susana Giménez (Gustavo Lanzavecchia).
Más allá del repulsivo hecho, rescato un par de frases - teniendo en cuenta que es famosa y su palabra tiene un gran peso mediático - :

"El que mata, tiene que morir" y "los derechos humanos siempre son para el asesino, no para la víctima".

Era hora de que alguien diga algo interesante en tv. Las dos cosas son ciertas, muchos dicen cosas como: "pagar mal con mal está mal". Pero ¿en qué se basan? ¿está mal hacer saber a varias familias destrozadas que un asesino va a dejar de delinquir para siempre? y de los derechos humanos siquiera se puede hablar, son humanos los mismos que violan esos derechos. Por ende, la palabra derechos humanos, para humanos que violan su propio derecho, carece de sentido.
Al juzgar, siempre hay que tener en cuenta qué hizo cada persona, no hay otra cosa por la que se la pueda juzgar en estos casos. Para el que viola el derecho de cada individuo no debería existir, siquiera, la posibilidad de pensar en derechos.
Y para concluír, hay un pensamiento ridículo que está impregnado en el cerebro de todos, hoy por hoy, similar a: "el gobierno tiene la culpa". El gobierno tiene una obligación, pero a la sociedad la construyen sus aldeanos, si los políticos son corruptos es porque los aldeanos son corruptos. Es poco probable que una sociedad racional elija a un presidente 100% ridículo para que lo represente. Estamos como estamos porque así queremos estar.

No necesitamos derechos humanos, necesitamos gente racional para que piense mil veces antes de realizar algún tipo de acto y sepa contemplar la visión del otro. Pero, en este país la gente es sumisa al modelo y eso no se puede pedir...

cuack: